Operación Huracán | Revelan 2da etapa del montaje para inculpar a mapuches en tráfico de armas.

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En una nueva investigación realizada por el medio CIPER se dio a conocer que el montaje denominado “Operación Huracán” tenía una segunda etapa que pretendía culpar a lideres mapuche de tráfico de armas desde Argentina. Todo en complicidad de agentes del país trasandino y liderado por el entonces Dir. Gral de Carabineros, B. Villalobos.

El reportaje habla de la segunda etapa de la denominada “Operación Huracán” denominada “Operación Andes” que buscaba inculpar a líderes mapuche en tráfico de armas desde Argentina, para ésto Villalobos realizó un acuerdo con Gendarmería argentina para desarrollar las tareas de espionaje en ambos países. Además se da cuenta de que los argentinos estaban impresionados por el software “Antorcha”, y que producto de que no sabían de que era un fraude se ocupó incluso para rastrear el paradero del joven Santiago Maldonado. También se da cuenta dechats que relevan detalles de los mensajes y citas reservadas entre Villalobos y el fiscal Sergio Moya dentro del contexto de nuevo montaje.

El rol del fiscal Sergio Moya

Fue Bruno Villalobos el que usó toda su influencia para que el Fiscal Moya, su amigo, se encargara de la investigación en el marco de la “Operación Andes”.

Para entender como se produjo ésto hay que remontarse al 2012, a la investigación para detener a Jorge Antonio Salazar Oporto y Alexis Cortés Torres. Ambos escaparon hacia Chile luego de ser acusados de asesinar al policía José Aigo en Argentina.

Dicho asesinato provocó gran revuelo debido a que la camioneta en la que viajaban los dos chilenos era conducida por Juan Marcos Fernández, hijo del intendente de San Martín de los Andes.

Fue entonces que el fiscal nacional Sabas Chahuán decidió que esa causa la investigara Moya, el cual no obtuvo resultados.

Fue en 2017 que la causa de Moya engancha con la Operación Andes luego de que Villalobos decidiera enviar a un teniente de la Unidad de Inteligencia Operativa Especializada (UIOE) a Argentina para seguir el rastro del supuesto tráfico de armas para organizaciones mapuche chilenas.

Siguiendo los pasos del “subversivo” Guillermo Romero Bello, efectivos de la UIOE han ubicado a uno de sus contactos: el prófugo Jorge Salazar, quien vive clandestino en ese país y han instalado un router cerca de la cabaña donde se esconde para interceptar todas sus comunicaciones. Esas interceptaciones son una falacia. La inteligencia policial opera con los métodos hacker de Álex Smith, conocido como el “profesor”, quien asegura que inventó un software (“Antorcha”) que intercepta los chats sin acceso físico a los aparatos telefónicos. El tiempo y la investigación judicial demostrarán que eso no es cierto.

Moya le dio la orden a la UIOE de investigar el paradero de los dos prófugos: Salazar y Cortés. De esta forma, la “Operación Andes” contó con un nuevo fiscal.

Operación Andes

El 2 de diciembre de 2017 era el debut de la “Operación Andes” que pretendía sorprender al prófugo Jorge Salazar y a sus cómplices.

Ese era el debut de la “Operación Andes”. Según la información supuestamente entregada por “Antorcha”, ese día se realizará un intercambio de armas en el sector de “la cascada” del Parque Nacional Vicente Pérez Rosales, en la Región de Los Lagos. Sin embargo, la carga estaba destinada a una banda narco de La Legua y no a comunidades mapuche.

La UIOE se desplegó en el parque nacional, los integrantes se comunicaban por radio y por WhatsApp. El capitán Leonardo Osses, jefe de la Oficina Informática Forense de la UIOE, envió supuestos mensajes interceptados por “Antorcha” a Guillermo Romero y a Jorge Salazar.

Pese a todos los preparativos, el procedimiento fracasó puesto que los policías fueron supuestamente detectados en los peajes. No hubo detenciones ni aparecieron armas y nadie puso en duda el programa “Antorcha”.

El programa “Antorcha” en Argentina

En el año 2017, Bruno Villalobos selló la colaboración de la UIOE con Gendarmería argentina. Fueron la desaparición de Santiago Maldonado y la intensidad del conflicto mapuche lo que revivió la estrecha relación, que para la “Operación Andes” era esencial.

Antes de llegar a Chile a una cumbre entre personal de Inteligencia de Carabineros y de Gendarmería trasandina, el comandante argentino, Domínguez, convencido de que “Antorcha” funciona, le pide ayuda a la UIOE. El oficial de Gendarmería le escribe el 12 de agosto, vía Whatsapp, a Patricio Marín solicitándole información sobre la cuenta de Facebook del hermano de Santiago Maldonado (Germán) y sobre una cédula chilena –perteneciente a Nicasio Luna– que apareció en el allanamiento al predio desde donde desapareció el joven.

El 15 de agosto Domínguez y Marín intercambian información sobre Luna, un cantautor chileno de Aysén y una de las últimas personas que estuvo con Maldonado antes de su desaparición. Ese mismo día el mayor Marín luce ante los argentinos las supuestas herramientas informáticas desarrolladas por el “profesor” Smith, las que le habrían permitido detectar que alguien abrió la cuenta de Facebook de Santiago Maldonado y además las coordenadas desde donde se hizo esa conexión. Los argentinos no se dan cuenta del engaño

Los policías de la UIOE le decían a los argentinos que si obtenían la red wifi desde la que se había hecho esa conexión, eran capaces de infiltrar las conversaciones privadas de esas cuentas. Todo era un invento.

Diez días después Marín le informa a Domínguez que “se autorizó el tema nuestro (interceptar los chats del celular de Maldonado) así que en cualquier momento empieza a reportar el celular de Maldonado imeil y todo”.“¡Impresionante!”, le contesta el argentino”.

Además del celular de Santiago Maldonado, también les indicaron que se logró interceptar el celular de su hermano, Germán.

Más tarde, el 21 de octubre, el capitán Leonardo Osses le envió a Marín por Whatsapp una supuesta conversación entre Santiago Maldonado y el cantautor Nicasio Luna.

La alianza entre las policias

Al respecto Ciper señala que: “La colaboración entre los carabineros y los gendarmes no se limita a los chats captados por “Antorcha” ni a la participación de policías chilenos en la indagatoria sobre Santiago Maldonado: incluye documentos sobre pasos migratorios no habilitados; cruces de chilenos por la cordillera; nombres de argentinos y europeos vinculados a la causa mapuche; datos de las vinculaciones entre la Coordinadora Arauco Malleco y la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM, organización radical de comuneros argentinos). Y también información de sus principales líderes, como Héctor Llaitul y Facundo Jonas Huala “.

Los intercambios de información incluyen datos migratorios, financieros y familiares de 24 personas –entre ciudadanos chilenos, argentinos, mexicanos e italianos-, los que según la policía estarían relacionados con la causa mapuche.

El montaje revelado.

Señala textual CIper sobre el estado actual de la “Operación Huracán” y sus responsables que; Hoy los chats entre los carabineros imputados por los montajes de la “Operación Huracán” (todos en retiro) son indagados por la Fiscalía para esclarecer las responsabilidades en los ilícitos. Es paradójico que luego de intentar inculpar a dirigentes mapuche como responsables de atentados incendiarios utilizando supuestas comunicaciones por Whatsapp interceptadas, ahora sean los propios chats de los policías los que los inculpan. Hay una diferencia: estos mensajes sí son verdaderos. CIPER los revisó y encontró información sobre cómo operaba la UIOE que hasta ahora no ha sido revelada.

Según las conversaciones sostenidas vía Whatsapp entre el capitán Osses y el mayor Marín, ya en marzo de 2017 la UIOE utilizaba la técnica del phishing para obtener passwords de cuentas de Facebook (enviar un correo electrónico disfrazado de una información de interés, que exige ingresar usuario y contraseña de redes sociales, y así apropiarse de esos antecedentes privados). Así se hizo el 22 de marzo de 2017 con la cuenta de la hermana de Jorge Huenchullán (dirigente de la comunidad de Temucuicui Autónoma).

Pocos días antes, Osses ya le hablaba a Marín sobre su relación con el “profesor” Álex Smith, y urgía porque la institución lo contratara. Estaba encandilado con las dotes informáticas que supuestamente poseía Smith. Lo alojó en su casa cuando la mujer del “profesor” lo echó luego de una noche de juerga con Osses. Eran amigos.

El 28 de marzo de 2017 el capitán Leonardo Osses le menciona por primera vez a Marín que interceptarán mensajes de whatsapp desde teléfonos de dirigentes mapuche. Ese día, Osses solicita “un teléfono con whatsap, chip prepago sin nombre asociado”. Smith aún no está contratado, pero algo le pagan. El 24 de abril Osses le señala a Marín: “El profe me planteo el tema que necesita $100.000 ya que no le han pagado de una pega en Conaf y está sin niuno”. La respuesta es positiva.

Entre los “blancos” a los que la UIOE supuestamente había intervenido su whatsapp está el líder mapuche Aucán Huilcamán, a quien dicen haberle interceptado chats con el Presidente de Bolivia, Evo Morales: “Hermano Aucan cuenta con mi apoyo y recursos” (22 de julio de 2017).

En sus chats, Osses le habla a Marín de un “contacto” al interior de Entel, quien les entregaría información sobre números telefónicos, propietarios y códigos.

El próximo hito en la investigación del montaje en la “Operación Huracán” tendrá lugar este jueves 25 de abril. Ese día serán reformalizados los imputados, entre los cuales no figura el general (r) Bruno Villalobos. Y en esa audiencia todos estos chats que han sido revelados por CIPER, en los que participan integrantes de la UIOE y en los que también intervino Villalobos, cobrarán vital importancia para definir el futuro de la causa.

Revisa el reportaje en detalle de CIPER CHILE

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