Por uso excesivo de la violencia con resultado de lesiones graves fue condenado el Carabinero Guillermo Manuel Noya a solo dos años de pena remitida, es decir, no pisará cárcel por lo hecho el 21 de Mayo de 2015 contra el joven universitario Rodrigo Avilés al que disparó directamente en la cabeza con el chorro de aguas del “guanaco”.
Respecto a los hechos, dejó por establecido la investigación y la sentencia del TOP de Valparaíso que “más allá de toda duda razonable, que aproximadamente a las 12,15 horas del 21 de mayo de 2015, en circunstancias que el condenado Noya Pavis, sargento segundo de Carabineros, “se desempeñaba como pitonero derecho del carro lanza aguas Nº LA-044, es solicitada la concurrencia de dicho móvil a Avenida Pedro Montt con Carrera de esta ciudad, atendido que se estaba produciendo un robo en el local comercial ‘Nextel’ ubicado en dicho lugar”.
“Que al ingresar el carro desde calle Edwards hacía la Avenida Pedro Montt, a la altura del número 1766 de dicha arteria, Noya Pavis accionó, sin justificación, el mecanismo, “lanzando un chorro de agua a las personas que se encontraban en la vereda opuesta al lugar donde ocurría el robo, golpeando a la víctima Rodrigo Avilés Bravo, a una distancia aproximada de 4,7 metros, quien cayó al suelo producto de la fuerza del agua, resultando con un traumatismo encéfalo craneano grave, en Glasgow 7, con pérdida de conciencia, hematoma subdural en hemisferio derecho, contusión del lóbulo frontal y temporal bilateral, y un daño axonal difuso, con un tiempo de enfermedad e incapacidad para el trabajo superior a treinta días”
Rodrigo Avilés señaló sobre la pena que “es baja para lo que me pasó, necesitamos una reestructuración de FF.EE. de Carabineros, ya vemos lo que pasó ahora con la joven”, mientras que su padre y abogado, Feliz Avilés, dijo que “no estamos de acuerdo con la pena (…) vamos a estudiar los antecedentes y asumimos lo que la Corte ha determinado”.