Fue en el seminario sobre jurisdicción constitucional en Chile y Alemania que Iván Aróstica, presidente del Tribunal Constitucional, realizó ante sus similares de Alemania un repaso histórico en el cual responsabilizó a Allende del “quiebre institucional” y de que se diera el golpe de Estado valorando lo hecho por el régimen cívico militar encabezado por Pinochet.
Aróstica señaló que “luego de un quiebre institucional especialmente traumático que concluye en 1973, que significó el derrumbe de la democracia chilena y que generó heridas que todavía nuestro país está intentando cicatrizar, una nueva Constitución dictada en 1980 y sometida a sucesivas reformas en los años posteriores propuso un marco institucional objetivamente más receptivo para equilibrar los desafíos de la convivencia democrática“.
Según consigna La Tercera, el presidente del TC agregó que “ustedes, los alemanes, advirtieron varias décadas antes un fenómeno que en América Latina se ha estado presentando en los últimos tiempos, que es perfectamente posible, en contextos de mesianismo político, que los mecanismos democráticos terminen siendo cooptados por derivas autoritarias o francamente totalitarias y que el resultado de esta distorsión sea una trampa para el sistema democrático“
