Así señaló la Cámara de Diputados en su página web señalando que los Diputados estudian ampliar el fracasado control preventivo de identidad a menores de 18 años y mayores de 16.
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La medida que no tiene sentido pues, el actual control preventivo de identidad si bien solo debe aplicarse a mayores de 18 años, para saber con exactitud la edad de una persona joven, de todas formas la policía debe pedir el carnet de identidad, lo que en la practica es un control preventivo de identidad; sigue siendo una herramienta que puede ser aplicada a cualquiera aunque no haga nada, lo que vulnera el principio de presunción de inocencia; además de una medida de fracaso absoluto en contra de la delincuencia, como los datos han demostrado, por su baja efectividad en detenciones; agregando por último que su real fin es solo criminalizar la protesta y aumentar el control social sobre la clase trabajadora.
La iniciativa que analiza la comisión de seguridad ciudadana de la Cámara de Diputados, (Boletín 11314), y en esta ocasión el Fiscal Nacional del Ministerio Público, Jorge Abott, y el Defensor Nacional, Andrés Mahnke, expusieron su opinión respecto al proyecto que busca ampliar la posibilidad de realizar estos controles a los menores de edad de entre 16 y 18 años, lo que señalaron tener dudas sobre la efectividad de que éste se amplé teniendo en cuenta la estadística sobre comisión delictual, la baja constante en la delincuencia juvenil y en que, en palabras del diputado Soto (PS) “la herramienta que se propone en este proyecto de ley pareciera ser que no tiene la conveniencia, ni la eficacia, ni eficiencia para poder producir algún resultado en la delincuencia juvenil”
Sin embargo y a pesar del fracaso rotundo que ha significado el control preventivo de identidad, el Diptado UDI, Juan Antonio Coloma (hijo del Senado Coloma), señaló “se han realizado más de un millón 100 mil controles de identidad hasta la fecha, más de 28 mil personas con órdenes de detención pendiente (2,5% de efectividad) han sido aprehendidas con solo 12 reclamos, o sea un reclamo por casi 100 mil controles de identidad; creo que esta es una muy buena noticia, los números de reclamo son mucho más bajos de los que se proyectaba en la discusión del control preventivo de identidad y creo que perfectamente uno puede avanzar en realizar estos controles, con características propias de los menores de edad, pero a personas que están entre los 16 y 18 años”
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Como se dijo cuando se aprobó el control preventivo de identidad, el proyecto de ley tenía como único fin criminalizar la protesta de la clase trabajadora, sirviendo para todo menos como herramienta para combatir la delincuencia, ya que, “de manera predecible, nadie con antecedentes se iba a arriesgar a pasar delante de Carabineros”. Que los datos finalmente solo han dejado en evidencia la real intención del “control preventivo de identidad”, revivir el control por sospecha que existía en dictadura para criminalizar la protesta y ejercer control social sobre la clase trabajadora y que solo se busca desviar el foco de la real razón de la existencia de la delincuencia, la brutal desigualdad social que genera éste sistema.
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