En medio del repunte de la crisis sanitaria por la que atraviesa el país producto de las insuficientes medidas sanitarias implementadas por el régimen, fue sorprendido conduciendo en estado de ebriedad y violando el toque de queda, un uniformado de la 2da Comisaría de carabineros de Licantén que se desplazaba por el sector La Leonera de dicha comuna.
Sorprendido por otros funcionarios policiales resultó Leandro Parra Castro, miembro de la dotación de la policía militarizada de Licantén, mientras los primeros estaban dando cumplimiento a una medida cautelar en el lugar.
En dicho momento notaron el andar de un vehículo de forma irregular el cual detuvieron dando cuenta de que quien conducía era otro carabinero que estaba en estado de ebriedad además de encontrarse violando el toque de queda.
Según medios locales el uniformado era parte de los hombres de confianza del que fuera el cuestionado mayor de la Comisaría de Licanten, Gustavo Estrada, quien hace pocos días fue trasladado a otra unidad policial del país.
Además de lo anterior la prefectura de Curicó habría señalado que se dará de baja inmediata a Parra Castro, al cual solo faltaría ser notificado.
