Altamente difundida por medio nacionales y locales, fue la noticia sobre la denominada “operación fusión” que se dio con la captura de dos bandas, en Curicó y Teno, que se dedicaban a tráfico de drogas y violentos delitos, donde el líder de una de éstas resultó ser un Carabinero en servicio activo que también estaba vinculado a un ilícito descubierto en marzo respecto a droga encontrada en un sector de Licantén.
Al miembro de la policía militarizada, líder de una de las bandas, se le incautó un kilo 200 gramos de Cannabis Sativa, y junto a ello 280 municiones de distinto calibre, consignó el fiscal Rodrigo Pizarro.
El fiscal además detalló que “A él se le imputa un delito ocurrido en el mes de marzo de este año, sucedido en las cercanías de Licantén, sector Los Coipos, en el cual se incautó cerca de 62 kilos de Cannabis Sativa y 500 plantas. Y, al día de hoy, al funcionario policial se le incautó un kilo 200 gramos de la misma droga además de 280 municiones de distinto calibre”.
El operativo se realizó allanando 20 domicilios desde los cuales se incautó; 4 kilos y 500 gramos de cannabis sativa procesada, 308 gramos de clorhidrato de cocaína, 63 pastillas de metanfetamina, 59 plantas del género cannabis, 2 escopetas, 1 pistola lanza bengala y 1 revólver a fogueo, 288 munición de distinto calibre, chalecos antibalas y la suma de $ 630.400 en efectivo, que se presume proviene de la venta de esta sustancias ilícitas, además de 3 vehículos, quedando diez de los trece detenidos con cautelar de prisión preventiva por robo con violencia e intimidación, tenencia ilegal de armas de fuego, tráfico de drogas y receptación de vehículos robados.
Fuente; ADN.