Según consigna The Clinic la segunda sala penal de la Corte Suprema, integrada por los mismos ministros que otorgaron la libertad condicional a seis violadores de derechos humanos hace algunos días, ahora otorgó libertad condicional a otros seis militares criminales de lesa humanidad culpables de la desaparición de Arturo Navarrete, obrero de Ferrocarriles del Estado, en octubre de 1973.
Señala el medio que la “Corte Suprema confirmó una rebaja de pena, de 13 a 5 años de prisión, y concedió la libertad vigilada a seis militares que en octubre de 1973 asesinaron a un obrero y lanzaron su cadáver a un río, sin que haya sido encontrado desde entonces, informaron hoy fuentes judiciales.”.
En efecto la sala especializada en asuntos penales del máximo Tribunal del país confirmó la decisión de la Corte de Apelaciones de Temuco que rebajó la pena de los seis violadores de Derechos Humanos de los 13 a los que los sentenció en primera instancia el juez especial Álvaro Mesa, a 5 años en Septiembre de 2017.
De ésta forma también la Corte Suprema ratificó los agentes de la Dictadura cívico-militar; Manuel Campos Cabello, Manuel Canales Valdés, Juan Cancino Belmar, Gabriel Dittus Marín, Sergio Vallejos Garcés y Héctor Villablanca Huenulao accedieran al beneficio de la libertad vigilada.
Entre los argumentos aceptados por los jueces que acogieron el fallo se condigna que, respecto a Campos, Canales y Villablanca, que “eran simples reclutas y sentían un “miedo irrefrenable” hacia su jefe, el teniente Manuel Espinoza Ponce, por lo cual obedecían ciegamente sus órdenes.”
Éste último, que falleció, también es sindicado como participe en la desaparición de otras once personas fusiladas, sin juicio y cuyos cuerpos también fueron arrojados al río en la ciudad de Temuco. Además habria recibido formación “antiguerrillera” en la escuela de las Américas y luego del Golpe de estado en 1973 formó durante la dictadura la “Patrulla Brava” formada por clases y reclutas del regimiento Tucapel con el realizando patrullajes, detenciones y custodia de personas en la vía públicaEspinoza Ponce, fallecido hace algún tiempo, estuvo también involucrado en la desaparición de otras once personas fusiladas sin juicio y sus cadáveres lanzados a ríos en Temuco.
Entre los detenidos por la patrulla de Espinoza se encuentra la víctima por la cual fueron condenado los militares a los cuales se les concedió el beneficio de libertad condicional. Su nombre, Arturo Alejandro Navarrete Leiva, el que tenía 21 años y trabajaba en la Empresa de Ferrocarriles del Estado cuando fue detenido por una patrulla militar, frente a numerosos testigos, en la ciudad de Temuco, en el sur de Chile, exactamente un mes después del Golpe Militar.
Dicha detención fue siempre negada por los militares, policías y centros de prisioneros a su madre, Magdalena Leiva, en sus numerosas diligencias por encontrarlo.