Fue por la denuncia del abogado y oficial de Enlace de a PDI, Alejandro Vignolo Morris, a fines de junio ante el Ministerio Público, de la posible comisión de delitos de “omisión de denuncia” y “encubrimiento” por parte de altos funcionarios que los ojos de la justicia ahora se posaron en dicha institución.
El documento de denuncia, revelado por biobiochile.cl, acusa al secretario de Estudios de la Escuela de Investigaciones Policiales, comisario Manuel Muñoz Soto, de solicitar pagos y beneficios “en forma constante” a un grupo de docentes, a cambio de mantenerlos como profesores”.
Agrega el abogado que Muñoz Soto solicitó a otro profesor de la Escuela “dádivas en razón de haber autorizado pagos en su favor por clases que éste no habría realizado”. Sin embargo no se especifican los montos defraudados.
Vignolo Morris, cuenta que a principios de marzo comunicó los hechos por los canales existentes dentro de la policía civil.
En específico a su jefe directo, el subprefecto Erick Menay Pino, quien informó de los hechos al subdirector operativo, Darío Ortega Moreno; quien a su vez ordenó al jefe de Inspectoría General, Óscar Rosas Bahamonde, iniciar una investigación interna. Finalmente recayó todo en el Departamento V “Asuntos Internos”.
De este modo Vignolo Morris dice que fue en marzo que ante Asuntos Internos; “Ratifiqué mi denuncia y presté declaración voluntaria ante el Comisario Carlos Vásquez Palma, a quien narré circunstanciadamente los hechos, identifiqué testigos, entregué antecedentes y documentos como medios de prueba.”
“Producto del desconocimiento y secreto absoluto del proceso investigativo de mi denuncia”, dice Vignolo Morris, se comunicó con el jefe de gabinete de la Subdirección Operativa, Erick Menay Pino, ara conocer de los avances de las indagatorias: pero la respuesta fue “No tengo idea”.
Esto último provocó que decidiera hacer la denuncia ante el Ministerio Público, quien terminó por dejar en manos de la Fiscalía Centro Norte el asunto.